21 A.D. de José Luis Rodríguez de la
Borbolla, los cordobeses habían seguido a España en su convencimiento de que el azul
era el color de moda. La mayoría de las
plazas fuertes de Andalucía habían sucumbido bajo el empuje de Don Mariano,
toda la Bética estaba conquistada, o en franco retroceso, ¿Toda? ¡No! Una Villa
de irreductibles ciuadanos aún resistía, un pueblo aún no se había dejado
convencer a pesar de todos los esfuerzos de Bocanegra… Si lo
sucedido ayer fuera parte de la trama de una novela épica, de esas que
literariamente no son nada del otro mundo pero que entretienen bastante, el
relato de lo acontecido podría haber empezado
de la forma que líneas más arriba se apunta, porque Villanueva de
Córdoba ha vuelto a votar socialista.
Pocos meses después de unas municipales que elevaron a
nuestro compañero Francisco Javier Arenas Vacas al puesto de alcalde, la
confianza de los jarotes se renueva en unas generales que han sido, sin la
posibilidad de poner otro calificativo, catastróficas para el PSOE. Una participación
del 76,43%, superando en dos puntos porcentuales a las elecciones de Mayo, con
más del 53% de los votos para nuestras siglas significan que el voto de castigo
que se preveía al gobierno de de la nación ha sido contrarrestado por una
gestión de gobierno municipal francamente notable.
Villanueva de Córdoba sigue siendo roja, quizás un puntito
en el mapa nacional teñido de azul que nos dejó el 20N, pero un punto que
podría ser un buen modelo de inicio para que en las elecciones autonómicas del
año que viene, la gente que vive en esta tierra nuestra que es Andalucía,
recuerde por qué es progresista.
Firmado: Ejecutiva Local de Villanueva de Córdoba
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